05 noviembre 2009

Bicicletas


Comí el otro día en un restaurante y en una de las paredes, a modo de decoración, había unas hornacinas acristaladas con estos maniquíes sosteniendo bicis.
En un descuido del jefe de sala, me acerqué a cada una de las hornacinas y les hice una rápida/mala foto. Después solo ha hecho falta revelarlas, unirlas en esta composición y subirlas aquí, cual esplendido trofeo (de caza menor, eso sí).

02 noviembre 2009

Paradoja lingüistica

El viejo Flanagan Green abrió los ojos cuando la nube etílica que envolvía su maltrecho cerebro se disipó. Lentamente las cosas fueron dejando de rodar a su alrededor, volviendo a su sitio, estabilizándose y así, cuatro horas después de que el último de los primeros rayos de la mañana abandonaran el sol y cruzaran los ocho minutos que nos separa, el viejo micks estuvo preparado para sentarse de nuevo a la mesa, coger tembloroso la pluma y continuar de nuevo con su obra.
Sabía lo que quería contar, el punto de vista desde el que pretendía narrar toda una vida de pequeños fracasos, tenía nebulosamente claro que podía ser un éxito, como lo habían sido tres escasos de sus veintisiete libros anteriores y sin embargo, no conseguía hacer avanzar la historia. El triste cuartucho donde se había recluido, casi enterrado, como ese viejo elefante que en el fondo era, estaba repleto de hojas arrugadas, manchadas o destrozadas y a medio escribir. Se sabía anclado, más bien varado aún en la primera página desde aquel lejano día que decidió empezarla contando su propia vida. Quizá fue esa falta de suerte en el arranque la que le había conducido hasta su desesperación actual. El alcohol era pues, consecuencia de su imposibilidad por hacer avanzar la historia, y no al revés. Sin embargo cogió tembloroso la pluma, asustado, ya casi fracasado, sabedor a desgana de cual podía ser el destino de la inmaculada cuartilla que le aguardaba desafiante sobre la mesa, acercó la punta al ya casi seco frasco de Pelican y comenzó por enésima vez la primera página de sus memorias; presentía que esta vez iba a ser distinto, algo le decía que iba a poder llegar a la segunda página, después a la tercera y así, casi sin darse cuenta, esa misma noche se acostaría triunfador, más tarde dejaría el alcohol, como ya lo había hecho veintitantas veces antes y a no más tardar un mes tendría, por fin, las 400 páginas que esperaba escribir.
Comenzó:
El viejo Green abrió los ojos cuando la nube etílica que envolvía su maltrecho cerebro se disipó. Lentamente las cosas fueron dejando de rodar a su alrededor, volviendo a su sitio, estabilizándose y así, cuatro horas después de que el último de los primeros rayos de la mañana abandonaran el sol y cruzaran los ocho minutos que nos separa, el viejo micks estuvo preparado para sentarse de nuevo a la mesa, coger tembloroso la pluma y continuar de nuevo con su obra...

23 octubre 2009

Amanecer

Amanecer

Prueb(ecill)a Lightroom 3




He estado trasteando con Lightroom 3.
Incluye alguna novedad, tampoco tantas como para que el 2.5 pasé a 3, pero bueno, están medianamente bien. Las dos que he utilizado en la imagen de arriba (subo tres porque hay sutiles diferencias entre ambas) son las de añadir grano -que mira tú por donde, tenemos a medio planeta fotográfico hablando (y mal) sobre el ruido=grano y va, y la gente de Adobe incorpora como novedad una opción para añadir grano-. Yo, sin ser un fanático del ruido, nunca estuve en contra de él, más bien al contrario, y todo porque mi Nikon D200 sabe de ruido un rato, así es que aplicaciones como Silver, NIK y otras las he utilizado siempre que he podido para añadir ruido, simular grano, o intensificar los efectos del mismo. Así que me parece la mar de bien esa inclusión en la nueva versión del programa. La otra novedad que he estado husmeando es la de jugar con el viñeteado intensificando el color (en vez de oscurecer o aclarar los bordes) y sí, hacía falta. Aunque ahora, lo que deberían hacer los programadores de Adobe es que el centro del círculo de viñeteado lo podamos elegir los usuarios del programa, y eso no está contemplado en esta versión 3.
Sin embargo, las dos cosas que creo más falta le hacen a Lightroom son, por un lado la posibilidad de elegir dónde están la zonas más claras (blanco)/medias (gris)/oscuras (negro) de la imagen, dejando que el resto de colores se ajusten a esos tres -o uno de esos tres- valores, elegidos selectivamente.
Por otro lado creo que el programa debería ser capaz de corregir las distorsiones que provoca la lente (barrilete personalizado según la lente utilizada), la posición donde se ubica la cámara (perspectiva horizontal, vertical...), las condiciones en que se tomó la imagen... Pero claro, entonces al programa ya solo le faltaría que el fondo de la aplicación tuviera un tono gris neutro por defecto, en vez del negro Lightroom y así lo podríamos llamar directamente Photoshop CS4.
Esas dos opciones, mal que bien sí se pueden encontrar en Photoshop, por eso creo que no las incorporan a Lightroom, pero creo que el programa las necesita.
Aunque entonces se parecerá a DXO, otro programa para revelar imágenes y que sí incorpora correcciones como las que creo necesita el de Adobe.

Geometrías visuales