08 abril 2008

Valle del Jerte







Estuvimos en el Jerte y por lo visto, en la mejor estación del año. Muchos cerezos en flor. Una locura fotográfica.

Jerte

¿Para esto queremos ser modernos?

Me quedo con la pared de la izquierda.

Estación de autobuses






Casar de Cáceres.
Un ejemplo desconocido -para mí- de la arquitectura que podemos encontrar escondida en los más insospechados lugares.

Plasencia

Gárgolas




Era de día y, aunque nublado, el dramatismo se pierde.

Interiores


Esperando a la clientela

...y esta, de juerga.

Coca-Cola, siempre ahí

El tiempo, que pasa para todos




Un recorrido por Trujillo

















Desde lo alto





Terrazas de Trujillo

Estuvimos en Trujillo unos días después de Pascua. Se notaba cierta ausencia de turistas, sobre todo en Cáceres donde casi no había nadie en el casco antiguo.
Siempre me he quejado de la masificación de turistas en los nucleos urbanos turísticos, mi postura ha sido habitualmente contraria a la expresión de ese acto gregario de ir donde van todos -y a la vez-, pero estos días, que no había nadie (o casi) a mi alrededor, he sentido una cierta necesidad de ellos. Es como si me hubiera equivocado en la elección de mi viaje, como si Cáceres, Tujillo, el Jerte... estuvieran fuera de los circuitos y yo debiera haber ido a Amsterdam, pongamos como ejemplo.
En fin, es una sensación que debo analizar porque no me arrepiento nada de haber ido a Extremadura.

Corren nuevos tiempos

Geometrías visuales